jueves, octubre 08, 2009

Revival Callia (by Ferchas)

Cómo no expulsar de mi cuerpo ese asco repentino que, cobarde, aparece en el peor de los momentos posibles en esta noche agria. Aparece, súbito, cuando ella se pegotea a uno de mis costados mojados, cuando ella respira honda y estruendosa en el silencio de mi cuarto. Me había dormido, segundos, una estela de pesadilla superficial que se estrella contra el sonido del aire que de su boca despega hasta una mis náuseas, aquellas náuseas cansadas de mímicas nocturnas.

Mis ojos, abiertos, recorren el techo de madera dura, la madera y sus líneas intensas, negras, como restos del escupitajo de una deidad de provincia, como saliva de petróleo, el acceso a otra esfera, allí, donde un dejo de humanidad me impide levantarme y arrojarla por la ventana, abierta, tan abierta, chupando el humo de sus cigarrillos muertos.

Sus rulos, despeinados, bombacha indecisa, musculosa marrón, la piel blanca, aroma prefabricado, suave, camina hacia el baño. Paz. Silencio entero, silencio virgen del devenir denso de su respiración en mi cuello, del movimiento suavemente imperceptible de sus dedos jugando al injusto rol de la caricia, dedos escribas de palabras y letras y curvas sobre mi cuerpo, mi pecho, agitado y lleno de líneas invisibles.

Lo daría todo, pienso, pienso con dolor, todo lo daría por tenerte, por salir corriendo a buscarte. Amor torpe, tonto, breve, besos efímeros que al final, como siempre, se quiebran en el asco inmenso de una noche monstruosa, una noche para ciegos.

03-03-04

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Qué pasó anoche? No sabías que la habías pasado tan mal.

Dalma Longo dijo...

Bálsamo, un bálsamo y profundo silencio es lo que necesita Riggy, para poder acallar a sus ruidosos oídos, para poder liberar su mente de malos pensamientos.

Saludos.

Ferchas dijo...

Eso te pasa por reflotar historias viejas, y peor aún: ajenas.
Bad Milk Man.

Riggy from the blog dijo...

Tu pluma rota, tu tinta como sangre derramada, simplemente me identificó. No hace falta decir más, o si?
R.

Ferchas dijo...

No, nada más.
Más claro que agua de lago suizo.

Anónimo dijo...

DURO