lunes, noviembre 20, 2006

Un mal sueño

Mi mamá me regaló un ventilador y cuando lo prendí me agarró una tristeza magna. La simpleza del aparato, el ruidito del motor que empieza a funcionar y todo me transporta. Hace calor, hay humedad y retrocedo tres años atrás.
Todo por un mal sueño, por un mail, un texto y una llamada.
Ese sueño…
Si tuviera que explicarlo no podría, pero el viernes salí con alguien y fui a comer a una parrilla a la que no volvía desde hace muchos años. Tres años o más…
Fue como volver al pasado y darse cuenta de que estamos en el presente. Ya nada era igual. No lo era el lugar, ni la comida. No lo era yo ni la persona que me acompañaba.
Después soñé. "Tremendo, tortuoso, horrible"
(Y me desperté, y le escribí y me llamó)
Nada…, confusión a la confusión.
Primeros síntomas de otro año que se va.
¿Qué estuve haciendo por estos días?
Ahí va lo que escribí hace unas semanas…, algo que quedó.

Pet Semetary
¿Qué estuve haciendo por estos días?
Qué tanto que no aparezco más, que no escribo, que tengo el pelo largo, que tengo sueño…
Es que la tele se puso confusa, que se puso movida, que se puso fea…
Es que me quiero ir de esa mierda y me enoja y me frustra
Resulta que si no era muy feliz ahora me declaro en desdicha profesional.
Pero no era tan grave…
No era y no es.
Me convocaron, o me colé, o algo así…, pero me ando paseando por la cárcel, entre rejas, humedad y miradas.
Ojos que saben de dolor, de muerte, de frialdad y de amor también.
La vida de una persona, un documental, algo extra, algo necesario, algo duro de ver.
La tumba, su olor, su gente (su vigi, su pajarito, su rancho, su faca y su arpón)
En eso ando, en eso pienso, esa es mi fuga.
La cárcel: recreos entre rejas.
Estoy quemadito, un bronceado perfecto. Nada de playas, ni montañas, ni ríos. Pabellón, asado en un patio caliente.
En eso estoy y aprendo entre asesinos y ladrones.
Aprendo de ese dolor, de esa soledad, de la impotencia y desesperación.
De entender y no poder, de querer salir adelante, de ser el rey a ser nadie.
De mucho sufrir mucho se aprende.
Eso pienso.

(Es raro que me asuste una mirada y no fue miedo, fue Lo gélido, Eso fue)


6 comentarios:

Anónimo dijo...

Mi queridisimo: solo vos sabes que fueron de esos dias, o quizas no lo sabes, pero sabes a donde pretendes que estos dias te conduzcan.-

No se si tus elecciones son libres o parte de una simple inercia; nose porque vuelven tus recuerdos tortuosos, y tampoco se porque no le ves salida al callejón.-

Solo se que es mejor disfrutar mientras se hace camino, es mejor despertrse, olvidarse de la pesadilla y aliviarse al recordar que "ya pasó" y desear que no vuelva a pasar.

Solo espero que veas la luz de salida, y te reencuentres con lo empezaste a buscar.-

No estes triste amigo.-
Ine.-

Carol dijo...

Grandisimo tema, si señor...

respecto a la sensación, la conozco... me paso cuando volvi a ver McGyver 400años despues... (en parte, solo en parte, es broma...)

Delirante dijo...

"De entender y no poder, de querer salir adelante, de ser el rey a ser nadie."

¿Sabés? La esperanza es lo último que se pierde. Si tu sueño es ser rey, considerándote nadie, me limito a decirte que serás tan grande como tus sueños y crecerás tanto como tus ganas de hacerlos realidad.

Sí, te la dejo picando...

Saludos :)!

Riggy from the blog dijo...

De ser el rey, del hampa, de la calle, de la cuadra, a estar encerrado entre miles y tan solo.
Me refería a los presos, pero acepto sus palabras Gise, quizás también tenga que ver conmigo, no?
Besos y gracias por pasar.

Al-Div@ dijo...

Ay, amigo, que esto ya se hizo largo y la tele es tu cárcel, el rey dentro de ese esquema asfixiante. Pero uno también aprende, y si estás lejos y con el pelo largo es porque el mundo se te pega a los ojos, y ya no podés mirar todo desde otro lugar, desde el de antes. Ya te lo he dicho: yo me anestesié los últimos años y no sé si eso está bueno. A veces extraño la calle y esas cachetadas magníficas que te da esta profesión. Que te amo, ya lo sabés, y que pronto rutearemos juntos, no tengo dudas.

Juan Manuel Bruñol Silvani dijo...

Mirá que hice fuerza.
Pero no volvés.